La Mole Moli confiesa haber agredido a su mujer con un golpe: “Le di una cachetada…”

En 2019, Fabio “la Mole” Moli, un ex boxeador y campeón de una edición de “Bailando por un sueño”, fue denunciado por agredir físicamente a su ex esposa, Marta “la Negra” Galiano.

Según el abogado de la demandante, el acusado enfrentará un juicio oral por violencia de género contra su ex pareja y otra mujer en las próximas semanas. Esta tarde, el deportista reveló cómo se está preparando para el proceso legal y brindó detalles sobre su situación.

Durante una entrevista en el programa “Intrusos” de América, el cordobés hizo referencia a las acusaciones de su ex esposa: “Nunca pensé que estaría aquí con la Negra en mi vida, es la primera vez que me enfrento a un juicio”, afirmó el denunciado.

Además, la Mole Moli, quien recientemente defendió las carreras de galgos, tiene prohibido comunicarse con su ex esposa y acercarse a su domicilio, el cual fue establecido por ella, a menos de 300 metros.

“Jamás la amenacé de muerte”

“Jamás la amenacé de muerte. Acepto que le di una cachetada. Reconozco que estuve mal y estoy en desacuerdo con la violencia. Me equivoqué”, confesó la Mole Moli, quien debe seguir compareciendo en el juzgado en la provincia de Córdoba.

“La Negra” Galiano, quien cuenta con custodia policial, afirmó que los episodios de violencia ocurrieron durante mucho tiempo y que recibió golpes frecuentes por parte del ex deportista. Además, la Negrita recibió apoyo psicológico y se le realizó una evaluación de riesgo en el Polo de la Mujer.

Cuando el equipo de “Intrusos” se acercó al hombre, este se mostró molesto con el programa, la reportera y Flor de la V, alegando que habían estado esperando durante mucho tiempo.

La periodista, Belén Bianchi, comentó que se notaba al ex boxeador nervioso, a lo que él respondió: “No, no, espera, ¿cuál es el problema? Tú me pediste la entrevista. Me dijiste que la hiciera ahora mismo, llevamos media hora aquí parados”.

Desde el estudio, los panelistas destacaron la actitud negativa de Fabio Moli, a quien en 2019 se le ordenó llevar una tobillera electrónica por parte de la justicia, aunque él no escuchó porque se perdió la conexión durante unos momentos. Sin embargo, el acusado recuperó la calma y pudieron continuar la entrevista sin problemas.